Se trata de un importante nacimiento a nivel internacional pues esta primera cría ha llegado justo cuando se cumplen 3 años de la creación del grupo reproductor de esta subespecie en peligro de extinción, Pan troglodytes verus, prioritaria en el programa europeo de conservación.
Ayer por la tarde nacía a la vista del público una cría de Chimpancé en el grupo reproductor de la subespecie Pan troglodytes verus que habita en las zonas que recrean las selvas africanas de BIOPARC Valencia. Los visitantes del parque pudieron ver el momento del parto y, posteriormente, a la madre con su hijo en brazos todavía con el cordón umbilical colgando y protegidos por las otras hembras. Todo sucedió de forma natural e imprevista y, a los pocos minutos, la madre se tumbaba en la hierba para tomar el sol con su bebé y aprovechar las agradables temperaturas del primaveral atardecer.
Los progenitores llegaron en 2015, Moreno, el macho reproductor, procedente de Parco Natura Viva en Bussolengo (Italia) y Natalia desde BIOPARC Fuengirola. Para ambos es su primera cría, pero el buen carácter del padre, el óptimo aprendizaje reproductivo de la madre que vivió la crianza de su hermana y la compañía de las otras hembras presagian que todo discurra con total normalidad.
BIOPARC Valencia y el grupo reproductor de la subespecie Pan troglodytes verus.
Tras un relevante estudio sobre la diversidad genética de la especie humana comparada con la de los grandes primates, la EAZA (Asociación Europea de Zoos y Acuarios) reorganizaba la población de chimpancés a nivel internacional según las 4 subespecies descubiertas. Así, dentro del programa “Great Ape Taxon Advisory Group” (grupo de expertos de grandes primates), se decidió que BIOPARC Valencia debía ser sede de uno de los grupos reproductores de la subespecie prioritaria en cuanto a su conservación, la Pan troglodytes verus.
La “familia” del parque valenciano está formada por un macho de 30 años, Moreno, y cinco hembras: Natalia de 15 años y sus dos hermanas Eva y Noelia de 23 y 11 años respectivamente, y Malin de 28 años y Py de 15 años, que llegaron de Boras Djurpark (Suecia). Este nacimiento, sorpresa y gran alegría para el equipo de cuidadores, es fundamental para poder garantizar la viabilidad y diversidad genética de los chimpancés y, en especial, de esta subespecie.