La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) es la red mundial con mayor conocimiento sobre la situación de la biodiversidad del planeta. Cada año su “tristemente” famosa Lista Roja, evalúa y cataloga el grado de amenaza de las especies y alerta sobre el preocupante incremento de las que se encuentran en peligro de extinción.
El deterioro medioambiental generalizado está motivando que cada año la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), que determina el estado de amenaza de la biodiversidad, sea más preocupante. Esta tendencia confirma que nos encontramos ante la denominada “Sexta extinción masiva”. Cada vez se alzan más voces para “llamar a la acción” y, entre ellas, BIOPARC Valencia tiene un papel destacado. Con el objetivo de conservar la naturaleza desarrolla su actividad en una doble dirección, como plataforma de concienciación y como actor activo en la conservación de las especies. Un paseo por los diferentes hábitats africanos del parque nos muestra gran variedad de ellas, incluyendo las más amenazadas. Entre la sabana, la selva ecuatorial, la exótica isla de Madagascar y los grandes humedales, podemos contemplar más de 100 especies incluidas en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
La mayor parte de las especies que acoge el parque valenciano forman parte de este registro conservacionista, desde las más emblemáticas hasta las más desconocidas, pero todas vitales para el mantenimiento del equilibrio de los ecosistemas.
Algunos visionarios como el británico Gerald Durrell o el profesor José Antonio Valverde en España entendieron el papel fundamental de la conservación y la reproducción en cautividad para la salvación de determinadas especies. BIOPARC Valencia es buen ejemplo de ello. Especies desconocidas para la mayoría como la gacela Mhorr, que llegó a estar extinta en su hábitat, o el Bongo oriental, del que sobrevive menos de un centenar de individuos en África, tienen ahora esperanza gracias a los programas internacionales para su preservación. En situación crítica también se encuentran iconos de la vida salvaje como gorilas o chimpancés, las jirafas baringo, los addax y otras muchas especies. La acción humana está motivando la desaparición a un ritmo sin precedentes de animales tan emblemáticos como elefantes, rinocerontes o leones, del que ayer mismo se conmemoraba el Día Mundial para denunciar su estado.
BIOPARC ofrece la posibilidad de admirar la belleza de esta naturaleza indómita que tenemos la obligación de proteger; un primer paso para despertar nuestra empatía por los animales, el amor por la naturaleza y el compromiso con su conservación. Para ello realiza una importante labor divulgativa en la visita que se convierte en una auténtica experiencia de “ocio con causa” a través de las actividades gratuitas a lo largo de toda la jornada. Una oportunidad para aumentar el conocimiento de las diferentes especies y comprender cómo se desarrolla la labor de este parque que está considerado uno de los mejores del mundo para garantizar el máximo bienestar de los animales.
Igualmente necesaria es la actuación in situ, la que lidera la Fundación BIOPARC y que trabaja con destacadas instituciones en favorecer la recuperación de las especies en sus hábitats. En conjunto, desde BIOPARC se aborda una acción global para la protección de la biodiversidad de nuestro planeta como el mejor legado hacia las generaciones futuras.